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Laura no está. Laura se fue. (Dialógo)

  • Foto del escritor: danielchawnamuche
    danielchawnamuche
  • 21 mar
  • 3 Min. de lectura

-Oe, ya dos años en la universidad y nada.

-¿Qué tal esa flaca?

-Si, es buena gente. Pero, no. Mejor está su amiga.

-Pero no habla. Es bien callada y nunca se le ve en las fiestas.

-¿Sabes cómo suena su voz?

-Casi.

-Cómo que casi.

-El otro día le pedí que me prestara su cuaderno.

-Y qué te dijo.

-Que no.

-A lo mejor ya está con alguien.

-Pero yo no la he visto con nadie.

-Huevas. Quizá con alguien de su barrio.

-Si, es probable.

-¿Y esa otra flaca?

-No, mano, esa estuvo contigo en la Pre.

-¿Y?

-Para que esté contigo debió estar loca... Además, ya la besó el diablo... ¡Jajaja!

-`Ta mare. Huevón, `toy que ayudo... Si sigues así, morirás invicto.

-Igual que tu viejo.

-Payaso.

-¡A ver esos dos que están haciendo bulla! (Exclamó la profesora, girando y dejando de escribir en la pizarra).

-La tía se dio cuenta. (Susurró mi amigo).

-Más aburrido, este curso. Da sueño.

-Oe, mira, mira. La tía está buena mira esas curvas.

-¡Copia mierda! No alucines.

-A ver... Funciones de la lengua... (Gesticulando obscenamente)

-Oe qué haces... Dejar de jugar con tu lengua... Mira, huevón. Esa flaca te ha visto y está que se caga de risa.

-La flaca sabe... Ah... Ya ves cholo... A las flacas les gusta que las hagas reír.

-¡Haber… hagan grupos de a tres! (Señaló la profesora)

-Cumpa, nadie va a estar en nuestro grupo. Así que busca el tuyo. Yo ya encontré el mío.

-Levante la mano quién aún no tiene grupo. (Preguntó la profesora).

(Inmediatamente levante el brazo).

-Ya… usted trabajará con esas dos señoritas de allá. (Añadió la profesora)

-Bien cumpita, te tocó con la muda. Provecho. (Dijo mi amigo, dándome de palmaditas en la espalda)

-Suave. Parece que no le ha gustado.

-Tu tranqui no más; a la otra ya la conoces.


(Me dirigí hacia ellas).


-Hola, llevamos Mate II en el verano. (Le dije a una de las chicas del grupo)

-Si. Si, ya me acuerdo. Fuiste el que salió en la mitad de la hora del examen.

-Se me aflojó el estómago. Me cagaba de miedo.

-¿En serio?

-No, pero tu amiga ya se está riendo.

-¡Ah! disculpa te presento a Laura.


(Dirigiéndome hacia ella)


-Hola. Me puedes decir la hora.

-¿Cómo? (Preguntó con fastidio)

-No. Digo, la hora en que nos reunimos para el trabajo. ("Que roche no entendió la broma”. Pensé).

-¿Después de ésto que tienes? (Me preguntó la chica que ya me conocía)

-Ecología

-¿Con Sánchez?

-No. Con Torres.

-Mmmmm. Nos buscas en el B-5 saliendo de clases. ¡Ay, la profe se va! Tengo que entregar mi práctica. Chicos espérenme un ratito, ya.

-Sí. Anda no más.

(Estando solo con la chica que menos hablaba. Tome valor para hablarle.)


-Laura. He estado pensando todos estos días en ti. Te he escrito un poema que parece una bobada. Es un poco cursi pero me basta que lo sepas:


Hoy he visto

De tu mirada tan incierta

Algo desconocido

Que poco cuesta comprender

Y siento más vida que antes.

Tantas noches he pasado

Escribiendo -para ti- tantos papeles

Y así -en ellos- esconder tu nombre

Un único verso.

Que me da vida

Y me quita.


-Quita... quita...

-Nada que quita, huevón. Despierta.

-`Ta mare estaba soñando rico, me le estaba mandando a la Laura.

-¿Quién es Laura?

-La flaquita que está saliendo por la puerta. Tiene ecología con Sánchez.

-Olvídalo cholo es de Industrias, vive en Surco y estudió en la Recoleta.

-Mmmmm. Si, no.


Dchawsj


Yamakai-entsa, marzo 2016.



 
 
 

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